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Bombardero Orbital de Sänger: ¿Podrían los alemanes haber construido un prototipo?
Bueno leyendo el artículo y los comentarios de los expertos en la materia, he visto un aspecto sobre el proyecto que parece que ha pasado desapercibido, pero a mi me intriga sobremanera. Es una opinión de un neófito sobre ingeniería y física, pero creo que Alemania en el período de 1938 a 1945, hubiera podido construir un prototipo, siempre y cuando el motor fuese fiable. En el aspecto de ingeniería y aleaciones Alemania estaba a la cabeza de Europa, y por lo tanto sí hubiera podido construir tanto el bastidor como el carenado del aparato, ya digo siempre y cuando el motor fuese fiable, incluyendo el rail de cerca de 3 Km de longitud que era el medio para ponerlo en el aire. Para construir un prototipo no es necesario que sea la versión final, siempre se construye para comprobar como se comporta en el momento del despegue, vuelo atmosférico y aterrizaje; por tanto nunca se le dota de todos los pesos necesarios en los primeros vuelos. El problema que yo veo en el modelo final sería precisamente el despegue, es decir poner el avión en orden de combate en el aire. Todos sabemos que cualquier movimiento debe vencer no solo la resistencia al aire sino también el rozamiento contra este y si el vehículo recorría una distancia de 3 Km sobre un riel, el rozamiento del deslizador y el riel. El rozamiento no solo ofrece una resistencia en sentido contrario al del movimiento del objeto sino también un aumento de la temperatura, y aquí es donde veo el problema. Este aumento de temperatura podría provocar un desastre. Me explico: durante la carrera de 11 segundos hasta alcanzar una velocidad en el suelo cercana al Mach 1, provocaría tal temperatura en los rodillos y rodamientos de bolas del lanzador que podría provocar que se fundieran o quedaran soldados, deteniendo todo movimiento circular de los rodillos. En la fecha que hablamos no existían materiales tan resistentes a las altas temperaturas, que se darían durante esos 11 segundos sin correr el riesgo de que se fundieran, deformaran o simplemente se soldaran entre sí. La única manera de conseguir eliminar ese rozamiento sería que el carril lanzador y el riel guía, no estuvieran en contacto entre sí. Hoy en día existe en Japón un monorraíl experimental que evita el rozamiento mediante la creación de un campo electromagnético que mantiene en suspensión ambos elementos, el tren y el rail. Utiliza los campos repulsores magnéticos para elevar unos milímetros el tren sobre el rail y aprovecha esos mismos campos repulsores (campo negativo y campo positivo) para impulsar hacia delante o hacia atrás el tren. Dudo que en Alemania durante esa época (1938-1945), se hubiera avanzado tanto en el electromagnetismo, para poder desarrollar un carril lanzador que fuera suspendido unos milímetros sobre el riel guía. Lo dicho es sólo una opinión de un neófito en el campo de la ingeniería y física. José Miguel Fernández Gil |
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