Operación rescate del Graf Spee

Batalla del Río de la Plata

Introducción

Miércoles 13 de diciembre de 1939, son las 6 de la mañana, en Montevideo amanece y la mayoría de sus ciudadanos comienzan a levantarse de la cama sin sospechar que en pocos minutos y cerca de las costas uruguayas va a tener lugar un combate naval que pondrá a prueba al gobierno uruguayo; tampoco se imaginan que dentro de unas cuantas horas tendrán un buque de guerra alemán dentro de su puerto, lo que de algún modo cambiará la rutina de muchos de ellos.

A esa misma hora y a unas 300 millas se encuentra el acorazado de bolsillo Graff Spee buscando nuevas presas. Faltan pocos días para el comienzo del verano Austral, está acabando la primavera y el día amanece despejado y con mucha visibilidad.

Hacia las 6,08 horas los vigías del Graff Spee divisan humo en el horizonte, de inmediato el comandante del Graff Spee, Hans Langsdorf ordena poner rumbo a lo que pueden ser nuevos buques mercantes para hundir, presume que posiblemente lleven escolta pero no espera que sean más de uno o dos destructores, poco se imagina que es uno de los varios grupos que desde que se supo de sus andanzas en el Atlántico Sur intentan darle caza.

El grupo está formado por tres cruceros británicos. Uno de ellos el Exeter crucero pesado con seis cañones de 203 mm. montados en tres torres y cuatro cañones de 102mm. (cuyo comandante era F.S. Bell).

Al Exeter le acompañan dos cruceros ligeros de la clase Leander, el Ajax con cuatro montajes dobles de 152 mm. (en el que va el comandante del grupo el comodoro Henry Hartwood) y Achilles (al mando del capitán W.E.Parry).

El Achilles estaba prestado a la marina neozelandesa desde 1937 y participaba en las labores de caza del Graff Spee.

El Graff Spee con sus 6 cañones de 280 mm. y sus 8 de 150 dispone de una mayor potencia artillera.

En el Ajax el comodoro Henry Hartwood sabe que el buque divisado es el esperado buque alemán. Ssegún sus palabras esperaba que el Graff Spee se acercara a las costas sudamericanas hacía tiempo, pues la penúltima víctima del Graff Spee, el mercante Doric Star, había radiado la señal RRR cuyo significado era “nos ataca una nave enemiga”.

Tras el hundimiento del Doric Star, Langsdorff puso rumbo a las costas sudamericanas y en su ruta se encontró con el vapor británico Streonshalh al que también hundió. En esta acción hubo un acontecimiento que posiblemente cambió el futuro del buque alemán, y fue que el capitán del vapor había lanzado una valija con documentos por la borda sin tomar la precaución de lastrarlos, la acción fue observada desde el Graff Spee y los documentos fueron recuperados.

Esos documentos tenían una información valiosa para los alemanes ya que en ellos estaban registrados los puntos de reunión de los buques británicos que abandonaban el estuario del Río de la Plata; mediante esos documentos Langsdorff supo que un grupo de cinco mercantes abandonaría Montevideo a las 5,52 del día 13 de diciembre y se dirigió hacia una zona cercana, poco después de esa hora las 6,08 fue cuando desde el buque alemán se divisaron los mástiles y el humo de los cruceros británicos que (tal y como ya se ha comentado) por una intuición de Hartwood estaban esperando la aparición del buque alemán.

Mapa ampliable

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La batalla

Los vigías de las unidades británicas ven humo procedente del buque alemán a las 6,14 horas, hacia el nortenoroeste (NNO) mientras siguen un rumbo estenoreste (ENE) justo en el momento en el que el Graff Spee abre fuego contra los buques británicos. También es cuando Hartwood dirige a los buques Ajax y Achilles en el rumbo ENE para rodear al buque alemán y atacar por babor al tiempo que el Exeter al mando del capitán Bell lo cambia para dirigirse hacia el buque enemigo NNO por la banda de estribor. La táctica tiene por objeto dispersar el fuego alemán dificultando de ese modo su puntería, intentando al tiempo atacar por los dos flancos.

Pocos segundos después el Exeter abre a su vez fuego sobre el buque alemán y unos minutos más tarde lo hacen los cruceros ligeros, primero el Achilles y casi a continuación el Ajax desde 17500 metros de distancia.

La reacción del buque alemán es disparar su torre de proa contra el Exeter y la de popa contra el Ajax.

La primera andanada del Exeter acierta al Graff Spee y éste a su vez, acierta al Exeter, matando a los servidores del tubo lanzatorpedos de estribor y destrozando los mecanismos de los cañones de la torre de popa, algunos focos de búsqueda, el avión que está en la catapulta y las comunicaciones con la sala de máquinas. A pesar de las ya importantes averías el Exeter siguió acercándose, en ese momento Langsdorff decide concentrar el fuego sobre él. De nuevo el Exeter recibió otro impacto esta vez contra su cubierta destrozando la parte delantera de una de sus torres y la timonera (caseta del timón) hiriendo o matando a varios tripulantes. El comandante del Exeter, que milagrosamente había salido ileso estableció una cadena de órdenes desde el puente a la timonera de popa donde algunos marineros se esforzaban por manejar el timón de un modo manual obedeciendo a las órdenes recibidas; restablecido el gobierno a duras penas y tras lanzar una salva de torpedos el Exeter recibió otros dos impactos que afectaron a su costado provocando un enorme agujero sobre la línea de flotación rompiendo su cubierta. Las averías en el crucero británico ya eran muy serias, las vías de agua habían hecho que el Exeter se escorase diez grados pero aún lanzó otra salva de torpedos, antes de ser de nuevo acertado, pero esta salva de torpedos falla el blanco igual que la anterior.

Hartwood viendo que las cosas se ponen feas para Bell y su buque, hace que el Ajax y el Achilles adopten tácticas de destructor y pasan a atacar con su artillería y torpedos acercándose de un modo temerario, dirigiéndose, para esquivar los proyectiles alemanes, hacia los puntos donde habían caído los proyectiles anteriores, las tácticas evasivas surtieron efecto hasta que uno de los proyectiles del Graff Spee acertó en el Ajax destruyendo dos torres. Eran las 7,25 horas, y a pesar de ello el buque británico lanza unos minutos después una salva de torpedos que al igual que los lanzados por el Exeter anteriormente no aciertan el objetivo.

Poco después de las 6,30 horas el Achilles hace despegar su avión para observar y orientar el tiro y casi al mismo tiempo el Achilles recibe un impacto y sufre algunas averías. Es el momento en que el acorazado alemán aprovecha para cambiar el rumbo y alejarse de sus enemigos mientras se oculta tras una cortina de humo. Ocho minutos después los dos pequeños cruceros británicos toman la misma dirección que había tomado el buque alemán dispuestos a no dejarle escapar.

Por fin a las 8,00 el Graff Spee abandonó el lugar de la acción y se dirigió a Montevideo a hacer reparaciones, Langsdorff lo hizo convencido de que con las averías que el buque tenía, su retorno a Alemania podía ser una verdadera odisea con una buena parte de la flota británica esperándole.

El Exeter y sus acompañantes habían acertado hasta 18 veces a su enemigo, una de ellas a proa lo que atravesó el casco, (ver fotos) otra había herido al mismo Langsdorff que tenía una conmoción cerebral y heridas en la cara y en un brazo. Los restantes y diversos daños se pueden resumir como siguen: las cocinas habían desaparecido, el suministro de agua potable estaba contaminado, algunos de sus cañones secundarios estaban fuera de combate, y lo peor, 37 tripulantes habían muerto, además de los 57 heridos de diversa consideración, la mayoría de ellos de gravedad.

Sus enemigos no habían salido tampoco bien parados del encontronazo.

Aunque el Ajax y el Aquiles salieron con menos daños, el primero tenía las dos torres de popa fuera de combate además de un gran agujero en la proa justo al lado del ancla y ambos tenían también sus bajas.

El peor parado, el Exeter tuvo que acabar por orden de Hartwood abandonando la acción para dirigirse a las Malvinas a reparar con 51 muertos y un buen número de heridos. El Cumberland que formaba parte del grupo y se encontraba en las Malvinas había recibido ya la orden de incorporarse al grupo para ayudar.

Mediavilla
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