Casos de Estudio 004:

Operación "Barbarroja"

Acciones en el frente Norte

3) El Ejército Rojo

Las purgas del Ejército Rojo

Las purgas realizadas por Stalin en el Ejército Rojo habían empezado en 1937 y prácticamente habían acabado con el cuerpo de oficiales. En total se ejecutaron a aproximadamente 35.000 oficiales del ejército y la armada (El 90% de los generales y el 80% de los coroneles)

El Mariscal soviético Tujachevskij que había impulsado en los años 30 la modernización del Ejército ruso fue fusilado durante las purgas del año 1937, acusado de espionaje. (Entre sus principales aportes figura la creación de los Cuerpos de Ejército Mecanizados, los cuales fueron disueltos luego de su muerte, y los carros de combate se distribuyeron entre la infantería al estilo del Ejército francés. Sin embargo en 1940, el nuevo Comisario de la Defensa, Mariscal Timoshenko, ordenó no disolver los mencionados Cuerpos de Ejércitos Mecanizados, y en noviembre se ordena crear 22 cuerpos más, cada uno de ellos formados por dos divisiones de carros de combate y una motorizada. Pero se había perdido un tiempo precioso, y se calculaba que eran necesarios dos o tres años para que estas reorganizaciones tuvieran efecto)

Lo peor de las purgas no fue solamente la desaparición forzada de tantos oficiales, sino el temor que quedó en los oficiales sobrevivientes. Este temor los llevó en combate a obedecer las órdenes más inverosímiles o inaplicables, y a no actuar sin orden expresa, aunque las circunstancias así lo exigieran. En definitiva, la rigidez se había introducido firmemente en el cuadro de mando ruso, en contraste con la relativa flexibilidad que tenían los comandantes alemanes, sobre todo los de las unidades del frente mismo de lucha.

Estado de las fuerzas armadas rusas

En 1939 el Ejército Rojo elimina la política vigente desde la revolución de que solamente los hijos de obreros y campesinos podían servir en el Ejército. De esta forma, cada año más de 600.000 jóvenes eran llamados a filas, para recibir instrucciones durante un periodo de 2 a 4 años y luego pasaban a la “primera reserva” por otros 10 a 15 años.

En 1940 era el ejército más numeroso del mundo...

En 1940 son restituidos los grados de general y almirante, que habían sido abolidos durante la revolución. Esto da al Ejército un sentido “nacional”.

Para junio de 1941 contaban los rusos con unas 230 a 240 divisiones, aunque no todas totalmente equipadas y 170 de ellas en la zona que los alemanes invadirían.

Durante los años 30 los rusos diseñaron y produjeron seis tipos de carros de combate: BT-2, BT-5, T-28, T-35, T-37 y T-38. Además pronto aparecerían en escena los notables T-34 y KV-1 Pero la producción de los mismos era lenta, y solamente se fabricaron 243 KV y 115 T-34 en 1941. Para el momento de la invasión alemana la cifra total de estos carros era de 1475 (1225 de ellos eran T-34)

El total de carros rusos al inicio de Barbarroja es engañoso, pues de los más de 22.000 carros de combate en lista, el 60% estaba en reparación o revisión. Además solamente 500 eran tanques pesados y 900 eran tanques medios. Por lo tanto el grueso de los tanques rusos eran de los modelos ligeros. (De todas formas, la industria rusa pronto iría invirtiendo estas proporciones, y en el resto de 1941 produjo 1.000 tanques pesados, 2.200 medios y 2.400 ligeros)

La artillería rusa estaba formada por 48.900 piezas más otras 63.900 pasadas a la reserva.

En cuanto a la aviación, los rusos habían producido aparatos con motores copiados a los modelos occidentales y también con diseños propios. Los bombarderos de gran radio de acción TB-3 y DB-3 y el caza I-17 eran producto de estos esfuerzos. Aparecieron a partir de 1939 una nueva serie de aviones más modernos, como los cazas LaGG-3, MiG-1, MiG-3, los bimotores Pe-2, el más moderno caza Yak-1 y el excelente avión de asalto Il-2. Sin embargo el ritmo de producción de la industria soviética no se pudo adecuar inmediatamente, y si bien en 1938 producía más de 4400 aparatos al año, para los años inmediatamente posteriores esta cifra seguía abarcando más que nada a los aviones de diseño más antiguo.

Ensayaron además la propulsión de aviones por motores a reacción y en 1934 montaron seis cohetes con combustible sólido en el I-14 experimental. Para 1940 lograron hacer volar un biplano con dos autorreactores, pero la potencia adicional conseguida de solamente 15% no se consideró adecuada para continuar el proyecto. Sin embargo el fruto de estas investigaciones sería la creación de un notable arma: el lanzacohetes múltiple “Katiuska”.

Los rusos habían desarrollado además, gracias al coronel general Voronov, el concepto de “División de Artillería”, unidad compuesta por piezas de todos los calibres y que se ponía al mando del comandante del frente, tanto para acciones ofensivas como defensivas, dando un notable poder de fuego a aquél.

Un aspecto en el cual los rusos llevaban un buen desempeño era en el de las tropas aerotransportadas y paracaidistas, organizando en 1941 Cuerpos de Ejército Aerotransportados, que sin embargo no estaban en su pleno potencial en junio.

La marina rusa también se vio afectada por las purgas y la desorganización general viéndose estancada desde 1937 a 1939. En ese año se pensó en construir 7 cruceros de 8.000 toneladas. Sin embargo, cuando los alemanes atacaron, la escuadra rusa tenía 4 viejos acorazados, 8 cruceros pesados, 3 cruceros ligeros, 28 destructores y 109 submarinos. La doctrina de aquel momento no era “oceánica”, por el contrario el rol de la marina rusa era el de la defensa costera y la protección de las vías marítimas internas.

Los puntos a favor dentro del lamentable cuadro de oficiales rusos, era que se había puesto al Mariscal Timoshenko presidiendo el Comisariado de Defensa y en su puesto de Comisario del Pueblo para la Defensa, estaba justo un peldaño debajo de Stalin, y al capacitado General Zukov en el STAVKA (Alto Mando Soviético) un peldaño debajo de Timoshenko en la estructura organizativa rusa. Ambos tendrían papeles trascendentes en Barbarroja.

Stalin creía que si no provocaba a los alemanes, podía evitar una guerra con ellos, al menos hasta 1942. Por ese motivo ordenó que las unidades de vanguardia del Ejército no estuvieran en las mismas fronteras, sino retiradas en algunos casos a 65 kilómetros de distancia. Y no se reaccionó ante las continuas violaciones del espacio aéreo ruso por parte de los aviones de reconocimiento alemanes.

Una fortaleza de los rusos era lo impenetrable de sus cuadros de organizaciones a los ojos de los alemanes. En efecto los servicios de inteligencia alemanes no conocían realmente la magnitud de fuerzas, ni las disposiciones de las mismas, a las que se habrían de enfrentar. (El Jefe del Servicio Secreto alemán, coronel Kinzel, estimaba que los rusos tenían solamente unas 60 buenas divisiones...)

Antes de la invasión...

Los preparativos de los alemanes no escaparon a la vista de Stalin, quien incluso había recibido a fines de diciembre de 1940, una carta anónima con los detalles de la directriz de Barbarroja, dada solamente unas semanas atrás. Además de otras advertencias, las continuas violaciones el espacio aéreo soviético por parte de aviones de reconocimiento alemanes eran un claro indicio de que algo se preparaba.

Sin embargo Stalin no realizó ningún movimiento, e incluso prohibió a los medios controlados por el gobierno mencionar nada al respecto. Su temor radicaba en que cualquier movimiento ruso podría ser el pretexto que buscaban los alemanes para desencadenar su ataque, tal como había pasado en la Primera Guerra Mundial. Sin embargo negoció con los japoneses un tratado de neutralidad para asegurar su retaguardia.

El Plan para la Defensa Exhaustiva de la Patria ideado por el general Gueorgui Zukov indicaba que en lugar de desplegar el grueso de las tropas en la frontera con los alemanes, serían distribuidas a lo largo de tres líneas sucesivas de defensa, en un total de más de 240 km hacia la retaguardia. La idea era que cada una de estas líneas fuera consumiendo las energías del atacante, quedando la reserva estratégica soviética por detrás de las tres líneas defensivas, pronta para contraatacar contra un rival ya debilitado. (La primer línea defensiva tenía más de 1.000.000 de soldados)

Muchos de los soldados rusos que quedaron atrapados en la retaguardia alemana se integraron en agrupaciones de guerrilleros, que tendrían un importante papel en la lucha, distrayendo a grandes unidades alemanas del frente principal de lucha.

La disciplina del Ejército Rojo estaba marcada por rígidas normas. Por ejemplo, en el caso de los soldados que se rendían al enemigo y lograban escapar para volver a sus filas, eran tratados no como héroes por poder haberse escapado, sino como traidores por haberse rendido. Podían ser fusilados o mandados a Siberia. Incluso la ley rusa permitía el encarcelamiento de los familiares de los soldados que se rindieran. También los comisarios políticos que acompañaban a las tropas tenían la potestad de fusilar a los desertores o cobardes.

De los 12.000 aviones rusos, aproximadamente unos 4.000 estaban en el Extremo Oriente de cara a los japoneses. Quedaban entonces unos 3.200 cazas, 2.200 bombarderos, 600 aviones de reconocimiento y 2.000 aviones de transporte y enlace en las zonas de operaciones de Barbarroja.

Gabriel Mansilla
gabman@adinet.com.uy

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